La
glándula pineal es el gran desconocido para la ciencia médica, sin
embargo es enorme en los bebes y esta activa todo el tiempo, duermen
mucho tiempo y entra más luz por la fontanela del cráneo en la
coronilla que por los ojos. Ven con la pineal hasta que aprenden a ver
con los ojos que es cuando comienzan a distinguir lo de afuera de lo de
dentro. Cuando aun no ven con los ojos son parte de todo lo que está
sucediendo a su alrededor, son toda una unidad y todo crea neuronas.
Debido a la relación de la pineal con el ADN a la velocidad de la luz se
crean una inmensa cantidad de neuronas cada dia y por cada experiencia o
palabra que suceda a su alrededor se generan neuronas y caminos
neuronales, en dos años tienen una red neuronal enorme que después hay
que podar en la educación para que puedan ser practicas y utilizadas. Si
cerca del bebe se hablo de matemáticas u otro idioma su cerebro ya
tiene neuronas para activar estas más rápidamente en su vida adulta. La
pineal es el receptor de la luz y de la información para la bioquímica
del crecimiento por eso es tan grande en los bebes. Cuando el cráneo ha
crecido y se pierde la apertura de la fontanela Sagital, en lo alto de
la coronilla la relación de la pineal con los ojos es prioritaria, no
solo por la luz, sino porque los estímulos lumínicos tienen una gran
activación de la pineal, como quedo claro en el programa anterior la luz
intensa y la oscuridad intensa activan la pineal que tiene células de
la visión igual que los ojos. También es responsable de los sueños,
imaginación y visualización, tiene capacidad telepática, lo que muchos
de nosotros conocemos por la comunicación telepática que tenemos con
nuestros animales domésticos o sucesos de conexión especial con otras
personas. Como la pineal es el reloj biológico es debido al mayor tamaño
del tercer ventrículo cerebral que unos animales puedan mantenerse
despiertos por la noche y ver en la oscuridad. Todos sabemos que los
animales se comunican telepáticamente entre ellos y con nosotros, ven el
ultravioleta y oyen el ultrasonido. Y nos preguntamos, como es que
ellos tienen esas facultades y nosotros no? En vez, nosotros tenemos la
razón y la creatividad que nos ayuda a manipular la materia, entender y
resolver cosas complejas. Quizas, teníamos que crecer aumentando
nuestra individualidad, lo que ha dado lugar al ego que tanto nos ha
separado ahora de la naturaleza. Pero hay algo mas que hace que nos
distingamos de los animales y es la apreciación de la belleza, lo que
los artistas nos hemos ocupado de ensalzar y abrir la percepción a una
inmensa cantidad de posibilidades de belleza. Realmente si viéramos las
cosas con su aura de luz, por ver el ultravioleta sería tan bello ya que
no veríamos la belleza de la forma material y querríamos cambiarla. Y
al parecer nuestra Madre Tierra Gaia ha querido que fuéramos
co-creadores con ella y apreciáramos la belleza de todo lo que ha creado
en la materia conjuntamente con la química de la luz SOLar y si de
momento somos hemos sido capaces de crear cosas materiales Y por eso
nuestra glándula pineal se ha quedado algo atrofiada, sin utilizar todas
sus posibilidades extrasensoriales y ahora esto ya esta cambiando hace
mucho tiempo.
En los años 60s llegamos al máximo de creatividad humana y comenzó todo a cambiar y la pineal comenzó a activarse de otra manera. Es la era de los hippis, donde comenzamos a indagar en las experiencias alucinógenas y ya habíamos llegado al máximo de maestría en demostrar e imitar la belleza de la naturaleza e incluso comenzamos a apreciar las formas y colores en composiciones abstractas, encontrando un sentido nuevo al afán de crear belleza. De alguna manera el arte había cumplido ya su función y sucedió la revolución artística de la cual yo fui parte en SOHO, NYC en los setenta, ya no hacíamos cuadros o esculturas, sino experiencias, instalaciones y performances, formas de arte que no tenían venta y comercio. Muchos artistas dirigimos nuestro arte hacia el ser humano y nos hicimos personas sensibles, el arte de la sanación. Lo importante en ese momento era ya el ser humano y no seguir imitando o recreando la naturaleza. La fotografía ya mostraba toda la belleza con una belleza sobrecogedora. Desde ese momento los artistas como precursores visionarios y chamanes de la magia se integraron en la experiencia psicológica, emocional y mística. Aunque aun hay grandes artistas vendiendo su obra, el arte está volviendo a sus orígenes chamánicos de sanación de individuos o grupos. Y si, ya hay bastante desconcierto de lo que es arte y de lo que no lo es y desde entonces hemos recuperado mucho de la medicina de nuestros antepasados.
En los años 60s llegamos al máximo de creatividad humana y comenzó todo a cambiar y la pineal comenzó a activarse de otra manera. Es la era de los hippis, donde comenzamos a indagar en las experiencias alucinógenas y ya habíamos llegado al máximo de maestría en demostrar e imitar la belleza de la naturaleza e incluso comenzamos a apreciar las formas y colores en composiciones abstractas, encontrando un sentido nuevo al afán de crear belleza. De alguna manera el arte había cumplido ya su función y sucedió la revolución artística de la cual yo fui parte en SOHO, NYC en los setenta, ya no hacíamos cuadros o esculturas, sino experiencias, instalaciones y performances, formas de arte que no tenían venta y comercio. Muchos artistas dirigimos nuestro arte hacia el ser humano y nos hicimos personas sensibles, el arte de la sanación. Lo importante en ese momento era ya el ser humano y no seguir imitando o recreando la naturaleza. La fotografía ya mostraba toda la belleza con una belleza sobrecogedora. Desde ese momento los artistas como precursores visionarios y chamanes de la magia se integraron en la experiencia psicológica, emocional y mística. Aunque aun hay grandes artistas vendiendo su obra, el arte está volviendo a sus orígenes chamánicos de sanación de individuos o grupos. Y si, ya hay bastante desconcierto de lo que es arte y de lo que no lo es y desde entonces hemos recuperado mucho de la medicina de nuestros antepasados.
